La limpieza, hidratación y humectación adecuada, son los principales cuidados que los expertos recomiendan para mantener el órgano más grande del cuerpo suave, visiblemente más sano, luminoso y radiante.

Bogotá, julio de 2021. Al estar en exposición constante al clima cambiante, la piel debe protegerse con mayor rigurosidad, así no se esté bajo el sol. En la actualidad, aún con el cambio de las rutinas diarias, el cuidado de la piel no debería ser diferente: así no se esté bajo el sol, nuestra piel necesita estar protegida y cuidada. Un sin número de factores, como los cambios de clima, los viajes e incluso la calefacción o aire acondicionado, pueden afectar el bienestar de la piel y su apariencia, ya sea en el rostro o en otras partes del cuerpo

 

Frente a esto, el cuidado de este importante órgano, el más grande del cuerpo, la especialista Laura Chacón, Esteticista y Directora Global de Entrenamiento y Educación sobre Productos y Nutrición de Herbalife Nutrition, comparte algunos consejos para apoyar su cuidado y protección, e incluso, para ayudar a recuperar su buen aspecto.

“Incorporar prácticas o hábitos como humectar o hidratar la piel y aplicar bloqueador solar en manos y cara también hacen parte de la atención que debemos brindarnos diariamente. Asimismo, mantener una limpieza adecuada y realizarla con productos especialmente desarrollados para el cuidado de la piel es primordial para eliminar la suciedad, el exceso de sudor y grasa”, expresa Chacón.

Ante la diversidad de actividades que realizan las personas y las distintas condiciones del entorno, los cuidados de la piel también son variados. Considere en ese sentido las siguientes recomendaciones:

  • Para la temporada de vacaciones o viajeros: Las cabinas de los aviones tienen una humedad extremadamente baja. En vuelos largos, este ambiente puede contribuir a que la piel se deshidrate rápidamente. Por ello, cremas hidratantes, humectantes, de manos y protectores labiales pueden ser grandes aliados en esta situación. El protector solar no debe faltar pues durante un vuelo las ventanas de los aviones no filtran los rayos UV. La piel agradecerá la hidratación constante y el consumo de agua adecuado durante las horas de vuelo.

    En los paseos a la playa lo ideal es usar atuendos elaborados en jersey o algodón, ya que son materiales transpirables que ayudan a mantener el cuerpo fresco durante los días calurosos. Para protegerse del sol, se debe aplicar protector solar UVA/UVB de amplio espectro 30 minutos antes de exponerse a los rayos cubriendo, además de las partes descubiertas, las manos y pies, las áreas ocultas como la zona posterior de la cabeza y las orejas.

  • En invierno o clima frío: La piel puede verse afectada cuando se expone a temperaturas bajas y de menor humedad, produciendo resequedad, picazón, molestia y sensibilidad. El aire seco puede provocar pequeñas grietas en la superficie de la piel, que actúan como puntos de entrada para impurezas, lo cual puede resultar doloroso.

Para esto, es bueno evitar los baños largos y con agua muy caliente pues influyen en la deshidratación del cutis y eliminan los aceites presentes en su superficie. También es recomendable usar frecuentemente productos humectantes. Si el ambiente en el hogar está muy seco, los humidificadores en zonas como la mesa de noche o el lugar de trabajo son de gran ayuda. Por otro lado, siempre es importante mantenernos hidratados. Bebidas como el agua y el té son buenas fuentes de hidratación.

En esta época de cambios en la cotidianidad, es bueno ayudar a complementar la sensación de bienestar general y el cuidado de la piel hace parte de ésta. Finalmente, Chacón recomienda a las personas lavar bien y frecuentemente las manos.